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La última vez que el Manchester City cayó en su estadio en una competición europea, fue el 19 de septiembre de 2018, en la apertura de la fase de grupos de la Champions League de 2018-2019. El verdugo fue el Olympique de Lyon un rival que no se le da especialmente bien y que en aquella ocasión le venció 1-2 con goles de Maxwell Cornet y Nabil Fekir, ahora en el Betis. El Lyon volvió a ser verdugo del City en la edición de 2020 en la burbuja de Lisboa.
Desde entonces han pasado 18 partidos en la máxima competición europea sin conocer la derrota. El conjunto de Pep Guardiola se ha vuelto infranqueable en su estadio y esa será una baza para el juego trascendental de mañana en la ida de los cuartos de final ante el Atlético de Madrid.
El Manchester City ha vencido en 16 ocasiones en sus últimos 18 juegos en Eastlands con la elástica de la Champions, el sueño del jeque Mansour que volverá a la carga en esta campaña en busca de la conquista europea.
Hasta el 2-1 en la última fase de grupos ante el PSG, el City acumuló una cascada de victorias en su estadio que han terminado por establecerlo por quinta vez consecutiva en la ronda de cuartos de final y con 6 victorias en sus últimos 7 juegos en su estadio, una estadística en la que el Chelsea y el Bayern le equiparán en Europa.
El City, favorito en esta eliminatoria ante el equipo de Simeone, buscará hacer prevalecer su localía con su habitual juego asociativo y su dinámica sideral que le permite llegar con muchos hombres a posiciones de ataque.
El juego por las bandas con Cancelo y Walker, Stones o incluso el portugués a perfil cambiado, más una actividad por dentro con excelso control del balón para agitar la defensa rival, serán las armas de un Manchester City que pelea con el Liverpool por la Premier, pero de reojo asoma con expectativa la vista a un duelo crucial de Champions en el que podría extender su invicto de 18 partidos sin conocer la derrota en su estadio. El último verdugo fue el Olympique de Lyon.