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Xavi, ya había anunciado antes de la disputa de esta Supercopa de Arabia Saudí, de la importancia de un título para darle un impulso a su etapa. La Supercopa de España de 2023, era una buena oportunidad para comenzar a buscar conquistas en un torneo corto, que no es de los más importantes, pero que para el Barcelona en esta etapa de reconstrucción, era una necesidad perentoria vencer y lo ha conseguido, con total autoridad.
El conjunto "Blaugrana" se ha impuesto 1-3 al Real Madrid en un clásico que dominó de principio a fin, con un planteamiento táctico revolucionario con el que sorprendió y superó a su rival y con dos piezas que han sido capitales como Pedri y Gavi, que manejaron el andamiaje del equipo a su antojo. Fue una superioridad aplastante por la posesión y cómo se utilizó la misma para tumbar a un rival que no suele perder finales, pero que hoy claudicó ante la gran oposición de su enconado rival.
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— FC Barcelona (@FCBarcelona) January 15, 2023
El Barça estaba necesitado de un título y eso se notó en el devenir del juego. Xavi, planteó un control abrumador con el balón, posicionando un doble pivote imperial para sostener el balón como Busquets y De Jong, que estuvieron brillantes, secundados por los jóvenes Pedri y Gavi, brillantes, que se encargaban de enlazar con Dembele algo más escorado por derecha y con un Robert Lewandowski, móvil y atacando siempre el espacio. Un 4-4-2 con el que gobernó el partido y con el que desarticuló a un Real Madrid que con su habitual 4-3-3 no tuvo opciones.
El Barça tuvo un 54 % de posesión global, pero tuvo tramos del juego en el que llegó al 70 % con pases de ruptura por dentro y por fuera, que destrozaron a un Madrid al que le pesan las piernas justo tras la vuelta de sus principales jugadores del Mundial de Qatar. El Madrid tiene un bajón físico alarmante y de eso se ha aprovechado el Barça para con un juego rápido, preciso e intenso, le destrozase.
El 0-1 tras una presión que recordó a las del Barça de Guardiola, la culminó un imperial Gavi, que definió con zurda a los 33 minutos. En ese momento, ya el Barça hacía méritos para ganar el juego con una ráfagas de ocasiones de gol que obligaban a la máxima exigencia de Thibaut Courtois.
El Barcelona mantuvo su aceleración en el juego y cerró la primera mitad con el 0-2 obra de Robert Lewandowski tras una asistencia precisa de Gavi. Un gol y un pase gol del jugador sevillano para erigirse como figura de la final.
En la segunda mitad, el Barça no bajó el pistón de su juego y mantuvo una dinámica futbolística en ascenso que alejó cualquier posibilidad de remontada del Real Madrid. El Barça fue solvente en defensa y con el balón en su poder, pocas opciones le dio un Real Madrid, que se acercaba pero sin generar peligro extremo. Tan sólo un remate de Rodrigo que atajó Ter Stegen -de nuevo espectacular- como preámbulo al tercer gol "Culé" obra de Pedri, llegando desde atrás para definir.
El partido ya se había acabado, pese al arreón final de orgullo del Madrid que descontó con un tanto de Benzema al minuto 92. 1-3 final y ya Xavi, había avisado de la necesidad imperiosa de ganar un título en Arabia Saudí, y el Barcelona, lo consiguió. Jugó con mayor necesidad y ambición que un Real Madrid al que sometió.