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La historia se ha vuelto a repetir. Como ante el PSG, el Chelsea, el Manchester City y el propio Liverpool en la final de París de la campaña pasada, justo cuando está cerca de la lona, el Madrid resurge entre sus cenizas y le da la "vuelta a la tortilla". Es un amigo de la adversidad y tras la Champions inverosímil de la temporada pasada -algo que parece irrepetible por la seguidilla de sucesos- ha sido capaz de salir del atolladero con una exhibición que le coloca de nuevo como el gran aspirante a ganar esta Copa de Europa.
Anoche en Anfield, justo cuando estaba contra las cuerdas, cuando caía sin atenuantes ante el Liverpool que le pasaba por encima 2-0 y que rozaba un nuevo gol que sin duda; hubiese sido lapidario, se recompuso como bloque para en una muestra de gallardía y jerarquía, darle la vuelta al resultado ya en el inicio de una segunda mitad antológica. Al final de un primer tiempo en el que navegó por aguas turbulentas, se las arregló para mantenerse en el partido con la ayuda de Alison y un Liverpool, que increíblemente se derrumbó cuando creyó que todo lo tenía hecho. El Pool se olvidó que esto es una eliminatoria de Champions y ante el Madrid, hay que jugar a un ritmo alto y ser sobretodo, muy firme en la defensa de lo conseguido. Una vez más se perdió en su propia complacencia.
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— UEFA Champions League (@ChampionsLeague) February 21, 2023
El Liverpool creyó que todo estaba hecho tras 20 minutos iniciales en los que sometió a su rival con una presión alta llena de intensidad y vitalidad, conjugaciones rápidas y una intimidación extrema que hacia presagiar un partido placido porque no tardaría en decantar el marcador a su favor. Y así fue, 2-0 a los 14 minutos con goles de Darwin Nuñez que definió con un tacón supremo y poco después, Mo Salah que sigue estando desafortunado ante el Madrid, se aprovechó de un fallo increíble de Courtois, para marcar el 2-0 que en ese momento, parecía darle seguridad al Pool, porque además estaba siendo superior en el trámite, las sensaciones eran las mejores.
Pero todo cambió tras la complacencia del Liverpool que aflojó en defensa y le dio vitalidad al Madrid, que notó dudas defensivas en el cuadro "Red" tras la vuelta de Virgil Van Dijk y la inseguridad que transmitió en toda la noche, Joe Gómez; que de paso, confirmó que no es un central de nivel para el Liverpool.
El Madrid olió sangre y reaccionó con furia hasta conseguir una igualdad inverosímil al cierre de la primera mitad con los tantos de Vinicius; el segundo, con la colaboración inestimable de un Alison, que parece ya no está para seguir siendo titular en el conjunto "Red".
Con el 2-2 todo se abrió y en ese momento, fue cuando el Madrid se impuso, porque en medio de la dificultad y de los grandes desafíos, tiene un plus sobre el Liverpool, al que le vino grande creerse superior y verse por delante de la contienda.
Aparecieron los ases de los últimos años; Modric, Benzema, Vinicius, Militao y se encargaron de darle un giro de 360 grados al juego con una lección de gallardía y competitividad que terminó por enmudecer a la atronadora parroquia de Anfield. El Madrid se hizo dueño de la situación e impuso su contundencia para dejar muy de cara su clasificación a los cuartos de final. La "machada" que deberá hacer el Liverpool en Chamartín, parece irreal, pero nunca se sabe.
Por ahora, el 2-5 final certifica que el Madrid es un serio aspirante en esta Champions y que pese a vivir momentos de real dificultad, es capaz de resurgir en medio de la tempestad. Es un intimo amigo de la adversidad.